Sin título. Técnica mixta. Medidas variables. Atelier Solar.
Sin título. Técnica mixta. Medidas variables
28 nov. a 7 dic. de 2024. Organiza: Atelier Solar
Karolina Esteban, Irene Ferrero, Carlos García, Eila Luque y Violeta Vizuete.
La exposición “Sin título. Medidas variables” es un ejemplo de las obras que se llevan a cabo en el estudio de Atelier Solar, situado en Arturo Soria 39, Madrid. Allí este grupo de artistas conformado por Karolina Esteban, Irene Ferrero, Carlos García, Eila Luque y Violeta Vizuete investigan sobre sus propias prácticas y se propicia el encuentro con el grupo.
En Atelier Solar se han realizado proyectos como las Residencias Africanas de Creación, con las que hemos traído en 2019 a cuatro artistas de cuatro países tales como Kenia, Rep. Democrática del Congo, Sudáfrica y Angola en residencias de dos meses, con alojamiento y estudio, exponiendo posterirmente sus trabajos en Galería Nueva. También hemos realizado dos ediciones de Comisaria Conoce Artista, que consiste en alojar y acompañar a comisarios y comisarias europeas durante 15 días de forma consecutiva y organizarles rutas por estudios de artista para que conozcan su obra y estos artistas puedan internacionalizar su práctica artística. En 2020 llevamos a cabo Salón Brand New, una exposición de artistas recién salidos de la carrera o de último curso de nueve universidades de todo el Estado español que tuvo lugar en Conde Duque. Además, hemos hecho exposiciones cada año desde 2015 con los y las artistas de nuestros estudios en lugares como el ya desaparecido Espacio Trapézio, la feria JustMAD o Galería Nueva, donde ahora se muestra esta selección de obras.
Sin título. Técnica mixta. Medidas variables nos acerca a prácticas tan diversas como la figuración de Irene Ferrero, la experimentación matérica de Eila Luque, la fotografía sobre textil y otras superficies de Karolina Esteban, la exploración conceptual de Violeta Vizuete y la pintura performativa de Carlos García. Tal diversidad de técnicas, preocupaciones, temáticas y formatos se despliegan en esta muestra que reúne a un grupo de jóvenes que exploran su propia manera de hacer arte compartiendo un espacio de trabajo y un tiempo de discusión.
La serie pictórica de Irene Ferrero explora las tensiones latentes entre lo instintivo y lo estructurado, entre la ferocidad del impulso animal y la delicadeza de lo contemplativo. A través de un lenguaje visual cargado de contraste y simbolismo, las obras despliegan un diálogo sobre la fuerza, el conflicto y la tregua, como si cada trazo participara en la alquimia emocional que transforma lo familiar en algo inquietantemente extraño.
Lo perturbador de estas imágenes evoca una proximidad que no termina de ser cómoda. El color actúa como un agente alquímico, catalizando emociones que oscilan entre lo visceral y lo sublime, mientras las formas animales devienen metáforas de un drama más amplio: el equilibrio precario entre la pulsión y la razón, entre lo visible y lo oculto.
Para Karolina Esteban la vida es como una tela bordada. Nos pasamos la primera parte de la vida en el lado bonito del bordado, pero la segunda parte de nuestra vida la pasamos en el otro lado. Es menos agradable, pero vemos cómo están dispuestos los hilos.
Según la artista, conforme vamos creciendo se tiende a olvidar u opacar el recuerdo de nuestra verdadera esencia: la parte bonita del bordado. Nos vemos forzados a enfrentar adversidades, abruma la adultez, crecen las dudas, acechan los miedos y surge la necesidad de asumir responsabilidades radicalmente necesarias. Aunque lo que importa realmente, es que la tela es nuestra, que nos pertenece.
El proyecto «Pieles», de Eila Luque, nace de la unión de medicina y arte. La artista investiga acerca de enfermedades de la piel, cicatrices y todo lo que abarca lo socialmente aceptado como antiestético, todo aquello que normalmente está oculto. Trata de visualizarlo y ver la belleza de todo lo que contiene y rodea. Abordando el dolor y la reparación. Es un trabajo en el que la abstracción es protagonista, pero con múltiples matices figurativos.
Dentro del proyecto, se diferencian y se investigan diferentes posibilidades de creación, sin tener una finalidad concreta, sino llegar a obras que surjan de pruebas y errores, dando sentido así a la intención del proyecto.
“Hardware intravenoso” es el proyecto de Violeta Vizuete, un trabajo abierto que se ha construido a lo largo de los años, a modo de diario-registro ilustrado: un gran archivo gráfico propio.
La autora ha llevado a cabo, forzándola al máximo, una narración solo a través de imágenes, para intentar contar lo que pasa por sus nervios (o, incluso, los de todos) con cierta libertad, en ejercicios de creación casi automáticos. Gran parte de este archivo se construye recombinando imágenes ya hechas (fotografías de referencia, revistas, recortes) y encontradas en distintas partes de la ciudad.
Carlos García cita a Ray Loriga para describir su trabajo: “Las piezas redondas no encajan en ninguna parte. Las piezas redondas rebotan y ser redondo y rebotar es como ser una pelota de tenis. Es mucho mejor ser un gancho de carne que pelota de tenis. La pelota de tenis no puede agarrar nada ni tiene con qué agarrarse”.
Galería Nueva Carabanchel. C/ Alejandro Sánchez 94, 28019 Madrid